Hacía tiempo que quería hacer esta entrada sobre la identificación
de algunos de los mosquiteros conflictivos de los confines orientales del
Paleártico occidental en cuanto a identificación se refiere. Esto viene en relación directa con mi reciente viaje a
Georgia, donde en grata compañía de varios amigos, pudimos disfrutar de las
especialidades ornitológicas (naturalísticas en general, mejor dicho) del Gran
Cáucaso y las amplias estepas del sur del país.
Uno de los objetivos más ambiciosos eran los pequeños
paseriformes que, como currucas o mosquiteros, pueden dar ciertos quebraderos
de cabeza en la identificación para el público, especialmente cuanto más “hacia
el Atlántico” nos movamos. Aquí quiero mostrar las características
identificativas más importantes de unos de los targets más interesantes de la
región caucásica: el mosquitero montano de Cáucaso (Phylloscopus lorenzii).
Quiero remarcar, a modo de inciso, que durante el viaje (28 de abril-6 de mayo)
pudimos observar con mucha calma cinco especies de Phylloscopus. Junto con Ph.
lorenzii, las especies observadas fueron Phylloscopus trochilus (mosquitero
musical), Phylloscopus sibilatrix (mosquitero silbador), Phylloscopus nitidus
(mosquitero del Cáucaso -o verde-) y Phylloscopus collybita (mosquitero común),
siendo este último es que se presta a más confusión con lorenzii.
Phylloscopus collybita collybita capturado para anillamiento en Las Vegas del sudeste de Madrid. Patas oscuras, colores verdosos/amarillentos, banda pectoral cobriza y una estructura corporal típica, caracterizan a esta especie. © Carlos Talabante
Un poco de antecedentes taxonómicos
Tomando como ejemplo a la especie más conflictiva, el
collybita, el dúo collybita/lorenzii fue considerado hasta hace relativamente
poco tiempo la misma especie: lorenzii, se consideraba la subespecie caucásica
del mosquitero común. Sin embargo, numerosas características morfológicas y
fonológicas, o las más recientes, genéticas, confirmaron la identidad
específica de lorenzii. Con estas, en la región del Cáucaso está presente la
forma monotípica de Phylloscopus lorenzii (es una especie monotípica o politípica en toda su
área de distribución -aunque luego hablaré de este tema con calma) y varias “formas” de mosquitero común. Me explico. Esta
región cuenta con población reproductora de collybita, la cual fue denominada
Ph. collybita "caucasica", pero que actualmente se considera que pertenece a la
subespecie abietinus (cf. Shirihai & Svensson 2018). A ésta, hay que añadir
el paso migratorio de los abietinus del centro y norte de Europa. Y, además,
cierto paso migratorio de la más oriental tristis. Con todo esto, en la región
que tratamos aquí tendríamos “tres tipos” de mosquiteros comunes: Ph. collybita
tristis (en paso migratorio), Ph. c. abietinus “europeos” (en paso migratorio)
y Ph. c. cf. abietinus “caucásicos”. Estos últimos serían los ejemplares
reproductores, y aunque determinados estudios apuntan a que se trata de
abietinus en toda regla, otros anotan que es necesario revisar su taxonomía con
el fin de ubicar correctamente a las poblaciones caucásicas reproductoras de
mosquitero común.
¿Pero qué sucede con los “lorenzii”? De primeras, alguien
puede decir que esto está mal, que Phylloscopus lorenzii actualmente no existe;
lo que existe realmente es Ph. sindianus lorenzii (mosquitero de Kachemira). Es decir, el mosquitero
montano del Cáucaso (“Mountain Chiffchaff”) en realidad es un complejo
taxonómico de dos subespecies diferenciadas geográficamente: Ph. s. sindianus
(región del Himalaya) y Ph. s. lorenzii (región caucásica y de Anatolia
oriental). Ambos taxones se encuentran diferenciados a nivel específico en algunas publicaciones actuales (Shirihai & Svensson 2018), pero no así en otras (HBW Alive). Las
diferencias entre ambos taxones son aún más difusas que las presentadas para el
complejo collybita. Con todo esto, para no complicar demasiado esta entrada y que
todo el mundo pueda entenderla, voy a considerar a los mosquiteros del Cáucaso
como Ph. (sindianus) lorenzii, a pesar de que alguien se tire de los pelos de la cabeza. Dicho
esto, vamos a pasar con el protagonista de la entrada.
Phyllsocopus (sindianus) lorenzii. El mosquitero montano del Cáucaso
Durante nuestra estancia en la región pudimos observar a
esta especie en buenos números en casi cualquier zona que visitamos del
Cáucaso, si bien es cierto, en determinadas regiones dominaba la presencia de
collybita frente a lorenzii. El hábitat donde detectamos mayor presencia de
lorenzii fueron las saucedas de Salix caucasica y los espinares de Hipphophoe
rhamnoides (espino amarillo). Estas formaciones vegetales se desarrollan
fundamentalmente en torno a los 1.000-1.500 m (dentro de la zona muestreada).
En este tipo de hábitats, lorenzii era el Phylloscopus dominante. Otras zonas
con presencia de la especie fueron parques urbanos (Pinus sylvestris, Populus
sps, Cedrus sps, etc.), pero aquí el dominante era collybita, posiblemente ejemplares en paso migratorio.
Vista general del hábitat clásico de Phylloscopus (s) lorenzii. Formaciones de Salix caucasica en laderas de montaña. Al fondo la cordillera del Kuro.© Carlos Talabante
Tomando como
medida todos los registros, se podría decir que la proporción
collybita:lorenzii era de 5:1 o 5:2, según zonas. Todas las demás especies de
Phylloscopus fueron detectadas en zonas de altitud media o baja, en el centro y
el sur del país.
Identificación
La pista del tipo de hábitat podía servir para localizar
zonas calientes de lorenzii, pero no para su identificación, dado el paso
masivo de collybita que presenta la zona y que éstos pueden estar en casi
cualquier zona arbolada. Para su identificación era necesaria estudiar con
detenimiento aspectos comportamentales, sonoros y morfológicos.
La estructura general de lorenzii es claramente distinta a
la de collybita, aunque es cierto que esto se advierte solo con práctica. Lorenzii
presenta una proyección primaria algo más corta que collybita y una cola
ligerísimamente más larga (aunque hay mucho solapamiento). Estas dos
características presentan a lorenzii como un mosquitero "colilargo".
Phylloscopus (s) lorenzii cantando sobre un Salix. Comparado con la mayoría de los collybita complex, se aprecia una longitud de cola algo mayor (ligero aspecto colilargo de lorenzii).Patas oscuras al igual que collybita. Plumaje pardo con matices canela (no se aprecia bien en la imagen) y escasez o nula cantidad de matices verdes y/o amarillentos. © Carlos Talabante
Otro aspecto
estructural de lorenzii es que presenta un cuello algo más masivo que
collybita, lo que le confiere, junto con una cabeza más gruesa, un aspecto más
cabezón. Esto es similar a lo ocurrido en las especies de Poecile, el carbonero
sibilino y el carbonero palustre. Ph. collybita no cuenta con estas
características en ninguna de sus subespecies euroasiáticas, o de manera más
particular, de las presentes en la región caucásica. Es posible que exista una
gradación morfológica con los mosquiteros caucásicos, teniendo como extremos a los
collybita y los lorenzii típicos. Sin embargo, hasta la fecha (que yo sepa) no
se han detectado híbridos entre estas dos especies (¡otra cosa es que se hayan
identificado como tales!)
Phylloscopus (s) lorenzii. Se observa el cuello y la cabeza gruesos, lo que le puede dar un aspecto más cabezón. No se observan matices amarillentos ni verdosos. © Carlos Talabante
Relacionado también con la cola, lorenzii parece que se
siente orgulloso de sus virtuosas rectrices. Digo esto, porque lorenzii a
diferencia de collybita mueve con cierta frecuencia la cola de arriba abajo.
Este comportamiento es más similar al observado en colirrojos o papamoscas, y
no observado en los collybita (o al menos no tan frecuentemente). Cierto es,
que estos movimientos verticales no son tan exagerados ni tan repetitivos como en el caso de los citados muscicápicos.
Teniendo en cuenta la coloración general de los mosquiteros
observados en la región, durante el viaje solo se observaron ejemplares de Ph. collybita
abietinus “europeos”, collybita cf. abietinus “caucásicos”, lorenzii y algunos
collybita con patrón intermedio entre los abietinus clásicos y el tristis-like.
Es decir, un poco de casi todo. Los lorenzii destacan sobre los demás
Phylloscopus por su colorido más cálido. Ph. collybita abietinus (sl.) presenta
tonos verdosos e incluso amarillo-verdosos en gran parte del plumaje,
especialmente en las partes superiores (dorso, píleo) y plumas de vuelo
(rectrices, primarias). La descripción de ejemplares de tristis o tristis-like
queda fuera del interés de esta entrada, pero recomiendo al lector que revise
la numerosa bibliografía que existe sobre esta especie (no obstante, es un
taxón que, grosso modo, presenta tonos algo más grisáceos que los demás). Por
su parte, lorenzii, cuenta con tonalidades cálidas en todo el plumaje, casi
diría que de color pardo canela. Ninguno de los ejemplares estudiados en el
campo contaba con matices verdosos destacados; tampoco amarillentos. Si bien es
cierto, algunos ejemplares presentaban ligeras tonalidades cenicientas. Éstos,
posiblemente se tratasen de ejemplares de 1º invierno, que fruto del desgaste
crean este matiz en su plumaje.
Phylloscopus collybita (collybita/abietinus). Ejemplar de mosquitero común bastante pardusco, pero dentro de la variabilidad habitual de collybita. Comparado este ejemplar con los lorenzii anteriores se aprecia una longitud de la cola "normal" (no da aspecto colilargo) y una cabeza "normal" sin el cuello grueso (no se aprecia cabezón). Si se observan numerosas regiones del plumaje con matices más verdosos (píleo, dorso) e incluso amarillentos (infracobertoras caudales, vértice flexor del ala). © Carlos Talabante
Fonológicamente ambas especies eran distinguibles: collybita
(sl.) marcando el clásico “chiff-chaff” que le proporciona su nombre anglosajón
y lorenzii con canto algo más “elaborado”. La impresión “de campo” fue que
lorenzii presenta un canto digamos que peor conseguido que el clásico “chiff-chaff”.
Los ejemplares identificados como lorenzii 100% mostraban cantos algo más
cortos que collybita (más estrofados se podría decir), con más “chaff” que
“chiff” en determinados individuos y sobre todo algo más acelerado en
determinadas secciones del canto (chirriante, según lo comentado en algunas
guías). En otros muchos de los ejemplares estudiados en el campo durante el
viaje, los cantos eran apenas atribuibles a ningún taxón, por lo que se
quedaron en duda al no poder ver al ave (que estaba escondido en la
vegetación).
Con todo esto, y a modo de conclusión, decir que ambos taxones muestran muchas más similitudes entre si que diferencias. Sería necesario reactivar (o focalizar, mejor dicho) algunos estudios que ubiquen taxonómicamente a estos mosquiteros, con el fin más inmediato de asegurar si Ph. sindianus y Ph. lorenzii suponen dos buenas especies separadas. Respecto a las diferencias con el complejo collybita, las diferencias parecen más asentadas, siendo posible diferenciar en campo a un buen número de ejemplares, mediante rasgos morfológicos, comportamentales o fonológicos.