El anillamiento de aves es una herramienta para su estudio, mediante su captura incruenta y posterior suelta. Durante el manejo de éstas se toman una serie de datos, referentes a la edad y el sexo, medidas, peso, estado físico del ave, etc. Todo ésto sirve para un mejor conocimiento de las especies y por consiguiente se obtienen los fundamentos necesarios para su protección. La labor del anillamiento científico sólo puede ser realizada por personas suficientemente cualificadas y autorizadas legalmente.



viernes, 19 de abril de 2013

OTRA ARGÉNTEA Y CURSO DE ANILLAMIENTO


Hola a todos,

como anillar, lo que se dice anillar, estoy anillando más bien poco en lo que va de año, pues de vez en cuando pongo fotillos de aves “madrileñas” un poco especiales, para comentarlas y dar actividad al blog. Hace unos meses comentaba en una entrada al blog a una gaviota argéntea  que se pudo ver en el parque de Madrid Río. Estas semanas se está viendo por la misma zona otro ejemplar de la misma especie, pero en este caso con una apariencia más juvenil que en el anterior caso. Así que en esta entrada comentaré un poco a este ejemplar, por si alguien se quiere dar un paseo por Madrid Río, y quiere ver a la gaviota, que sepa qué tiene que buscar y sobre todo en qué fijarse, para no confundirla con otras parecidas. Todas las fotos, de esta tarde.


Aquí la vemos. En principio podría ser cualquier cosa, ya que en estas fechas las gaviotas están con el plumaje abrasado por el sol y parcialmente mudadas. Sin embargo destacan varios detalles que nos permiten aclarar la especie:

  1. Patrón de las grandes cobertoras, típico de gaviotas argénteas, aunque alguna patiamarilla del Mediterráneo pueda tener un patrón engañosamente semejante por estas fechas debido al desgaste. 
  2. Plumillas gris perla mudadas en el dorso y escapulares. Este color claro descarta, evidentemente, a una sombría de su misma edad. 
  3. Patas rosadas. Aunque las gaviotas grandes a esta edad suelen tener las patas rositas, en esta especie el rosa es más patente.

Bueno, decir que el ave en cuestión es un ejemplar de primer verano. Los plumajes de “verano” no son plumajes verdaderos en muchas aves, sino que se tratan de los estados de transición entre los plumajes de invierno, en nuestro caso de 1º y 2º invierno. Estos “plumajes veraniegos” se forman, al menos en las gaviotas grandes, por el desgaste de las plumas y por una  muda parcial, que en nuestro caso vemos que afecta sobre todo al dorso.



En esta otra foto, desde otro punto de vista, fijaos en la base del pico que vira a un tono rosado. Esto no es exclusivo de argénteas, pero si es cierto que éstas suelen adquirir tonos más pálidos (rosa en este caso) y más temprano, que las otras gavotas grandes, aunque en esta época del año este detalle hay que cogerlo con pinzas y no es definitorio. 

Un detalle en el que siempre me fijo en las argénteas es en el rayado-moteado de las plumas de las infracobertoras caudales y el vientre, las cuales suelen mantener más “marcado” que otras gaviotas grandes, que blanquean más esta zona (es sólo una apreciación, y para nada definitorio).


Y aquí acicalándose. Se aprecia muy bien el tremendo desgaste de las plumas primarias y sobre todo de las terciarias, a las cuales ya les sobresale el raquis.


En este caso es una gaviota sombría para comparar, también de 1º verano. En general es más oscura, presenta un patrón de coloración diferente y el pico es más delgadito y de bordes más paralelos.



Aprovecho la entrada para publicitar también el curso de anillamiento que cada dos años organiza la estupenda gente de SEO-Alectoris (y en el que por cierto, participo hablando de gaviotas y rapaces…). Así que si tenéis tiempo y ganas, podéis apuntaros al curso.

Y por lo demás, a ver si empiezan las salidas de anillamiento de ricotís, bengalís y tomilleras, que estoy que me subo por las paredes!


Un saludo
Carlos Talabante

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