Las zonas verdes dentro de la ciudad son un buen refugio para las aves, en el que éstas se concentran y reproducen con unas condiciones beneficiosas en algunos aspectos frente a las zonas no urbanizadas. Así, la ausencia de determinados depredadores, la disponibilidad de alimento e incluso una climatología más favorable, son factores que aprovechan ciertas especies para asentarse en los parques urbanos.En este sentido, el Parque del Retiro de Madrid es un buen indicador de esta situación.
Como complemento al estudio de las zonas urbanas, realicé dos jornadas de anillamiento recién entrado el verano, con dos redes de 12 metros y de 4 horas cada una. Los resultados fueron bastante satisfactorios a pesar de ser zonas de bastante trasiego.
En total, 25 individuos de 8 especies distintas, con un interesante control de un mirlo común, cuya procedencia tardaremos algún tiempo en conocer después de tramitar el número de anilla.
Gorrión común (Passer domesticus) 8
Paloma zurita (Columba oenas) 5
Estornino negro (Sturnus unicolor) 2
Carbonero garrapinos (Parus ater) 1
Mirlo común (Turdus merula) 3 + 1c
Curruca capirotada (Sylvia atricapilla) 2
Carbonero común (Parus major) 1
Paloma torcaz (Columba palumbus) 2
El lugar ofrece una buena oportunidad para el anillamiento de la Paloma zurita, especie poco anillada de hábitos esquivos y cuyos movimientos migratorios no están tan estudiados como los de su pariente próximo, la Paloma torcaz.
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